atopei na cova do raposo un meme deses que por moito que rastrexes nunca atopas ó cabrón que o ideou, e que farei (seguro que con mais pena que gloria) porque me gustou que o raposiño se acordara de min. consiste en contestar a cinco preguntas: cousas que farías se soubeses que ó dia seguinte se ía acabar o mundo.
qué canción escoitaría; qué libro lería; con quén falaría; qué comería; qué faría e que me quedaría por facer; vamos unhas preguntiñas de nada...
eso de que todos saiban que se acaba o mundo, non lle acai nada ben á miña personalidade un pouco histriónica: xa que vai ser o meu último dia gustaríame ser a prota absoluta do meu entorno, i eso non sería posible porque todos estarían moi ocupados montando os seus propios dramas. así que voulle dar un pequeno xiro e contestaréi ás cinco preguntas sendo só o meu último día neste mundo:
lería vellas cartas da miña nai, que xa morreu. falaría co meu fillo serena e tranquilamente, para non transmitirlle angustia, das cousas importantes que aprendín na vida, paseando por carballeiras e campos, calando de cando en vez para escoitar a canción da auga do regato, dos paxaros, e do aire entre as follas. comería nunha grande terraza sobre o mar, con toda a xente que quero á mesa, unhas ameixas á mariñeira, solomillo cunha boa salsiña e de guarnición patacas asadas, bo viño e unha degustación de postres variados, con moitas bromas, todas á miña costa; tamén a conta, por suposto. follaría, cos sentidos atentos: o tacto, a vista, o olfato... os cinco, coma se fose acabar o mundo, e despois sentariamonos os dous, caladiños, a ver como se pon o sol, a cabeza deitada no seu hombreiro. e quedaríame por facer, aprender a vivir dun xeito máis armónico e feliz. é dicir: o fundamental.
Fuente de Obaya en Gobiendes, Colunga, Asturias. Fotografía de la galería de leedixon
Preguntas a cualquier vecino en Gobiendes, y encuentras el camino hacia Sueve. 10 minutos caminando para llegar al río, pasas sobre un tronco de árbol que hace de puente entre las dos orillas, otros 10 minutos subiendo para encontrar el manantial y podrás escuchar otra canción del agua entre la espuma...
información tomada de la web de la Comunidad de Noticias de Oriente de Asturias
Manantial de los Montes de la Ermita, en un pueblo abandonado que están arreglando poco a poco los vecinos y que pertenece al municipio de Igueña, en el Bierzo. fotografía de la galería de masaimanta en flickr
El agua escribe sobre las piedras su historia sin regreso.
Corre sobre el pasado de su líquida especie. Aún así, su transparencia es canto. No es gemido, es canto. No es lamento, es canto. Y mientras corre, compone su propio himno. Y corre y canta.Susana Giraudo
no, hombre, déjate estar la camisa, ves? a éso me refiero, a ponerte las poses, los gestos y las frases detrás de los que estás, que sí que te hacen interesante, pero me gustaría ver al niño, y no es la foto de bebé con el culito gordo; es que me emociono con el entorno, a mí me dejas en el campo y se me caen los años como si fueran escamas que cubren la delicadita yo que está debajo, que me deshago en olores de verdes, en caricias de aires y me fundo con,
pásame la botella, está bueno el riojita éste, el paisaje que está ya un poco otoñal, ves como ha cambiado la luz?
de verdad no te gusta el roquefort?, pues te lo cambio por la cecina del bierzo, que está deliciosa, y puedes dejar de sonreir de esa manera, que ya me callo... anda, ponme la mano
leyendo hoy esta entrada de el segundo de cris, recordé un párrafo, anotado hace algún tiempo, de los que me confirmaron algo aprendido.
-
Muñoz Molina: Ardor guerrero
"Era uno de esos amores en los que uno de los dos amantes, el más apasionado, se convierte en rehén de las incertidumbres y las opacidades del otro, y las alimenta sin saberlo con la asiduidad de su ternura, que el otro fácilmente considera opresiva, retrayéndose en la misma medida en que se le solicita y se le ofrece el amor"
y cómo me contagia, cómo me sube la vida piernas arriba, me invade de emoción todo el cuerpo para explotar en el pecho y salir luego por los brazos perdiéndose en el aire.
I feel good. y eso que me duele la cabeza y no te tengo, ni pollas.
-
(y es este un te genérico, el te sin nombre propio, el que engloba todos los tes que me han hecho sentir bien.)
-
lástima que sea sólo con uno de esos amores que ya sabes que no pueden durar, (ni podrías resistirlo tampoco), pero que (tal vez por eso) te empeñas en vivir; un amor escurridizo, que no es seguro, ni cotidiano, ni fácil, sea con el que
me da un subidón
al hacerlo mío por un tiempo -ese tiempo en paréntesis- que me hace gritar por dentro, como james brown:
so good, so good, I got you!
y el te tengo viaja por las arterias, a impulsos, sístole, diástole, y te, me tocas y me vuelvo gelatina. I knew that I wouldn't of.
a pesar de que ahora ya no quiera el deseo termita, si no el deseo tranquilo, el que lleva a la intimidad y al abrazo posterior que termina en un sueño confiado,
escuchando I feel good
me sube la vida piernas arriba, aunque me duela la cabeza y no te tenga, ni pollas.
Tantum doluerunt quantum doloribus se inserverunt. Agustín de Hipona
(Tanto como se han entregado al dolor, así han sufrido)
-
cuando leíste este latinajo, en 1996, quisiste interiorizarlo. hasta pensaste en escribirlo en el espejo del cuarto de baño para leerlo cada día (y de paso intrigar a las visitas). han pasado 12 años y no has cambiado.